Jorge Antonio Lagos quedó oficialmente acusado y detenido por el atroz doble femicidio de Norma Beatriz Morales y Luz de los Milagros Prieto. La defensa intento vincular sus problemas de adiciones como atenuante e intentar la inimputabilidad del mismo, a pesar del intento aún no se lo consideró, las pruebas recabadas por la fiscalía demuestran un hecho totalmente aberrante. Este miércoles en la audiencia de formulación de cargos contra el presunto doble femicida, la fiscal del caso María Eugenia Titanti relató que “se le endilga al imputado el hecho ocurrido el 11 de febrero pasado en horas de la madrugada cuando abusó sexualmente y dio muerte a Luz de los Milagros Prieto para luego dar muerte a Norma Beatriz Morales en la vivienda del barrio Los Hornitos. Para ello, se valió de al menos un arma blanca, además de lo cual les propinó golpes contundentes”
El informe de autopsia de ambas víctimas es, cuanto menos, impactante. En el caso de Luz, se le hallaron golpes en todo el cuerpo y principalmente hematomas en rostro y cuello que dan cuenta de un aparente aplastamiento y sujeción del cuello. Se estima que mientras la sujetaba, el presunto femicida violó de manera atroz de acuerdo a las pruebas recabadas, circunstancias en las que la joven intentó defenderse y terminó con cortes en manos y antebrazos. Finalmente, fue asesinada de dos puñaladas mortales: una en la región pectoral que llegó a atravesarle el hueso esternón y lesionarle el corazón; mientras que la segunda fue hecha en la zona abdominal y “dada su gran intensidad”, lesionó los órganos internos y generó un orificio de salida por la zona lumbar. Todo esto le ocasionó la muerte a la joven de 20 años por una hemorragia masiva por lesión perforante cardíaca, realizada con un “arma blanca de filo único, hoja larga y un ancho aproximado de 4 centímetros”. La forense que realizó el informe de autopsia resaltó “la multiplicidad de lesiones y la violencia, brutalidad y fuerza extrema” que demostraban las heridas en el cuerpo de la joven.En cuanto al cuerpo de su madre, Morales, se le encontraron “al menos 50 lesiones cortantes y punzocortantes en torso, rostro y antebrazos, estas últimas de caracter defensivo, y golpes contundentes en los mismos lugares”. Cuatro de esas lesiones realizadas con arma blanca tuvieron, según los profesionales que practicaron la autopsia, la entidad para provocar el deceso de la mujer de 58 años por “shock hemorrágico producido por lesión vascular y cardíaca”. En su cuerpo también se hallaron restros de semen, aunque no así lesiones compatibles con un ataque sexual.
Luego de asesinar a ambas, Lagos habría desmembrado el cuerpo de su ex pareja, para luego trasladar las partes en bolsas de residuos en el Peugeot 205 de color rojo, propiedad de Morales, hasta la zona de Parque Industrial de Plottier, donde fue hallado.